¿Cuál fue el primer ser vivo que viajó al espacio?
Fue Laika, una perrita rusa de tres años de edad.
El primer ser vivo que viajó al espacio fue una perrita llamada Laika. En noviembre de 1957, tres años y medio antes de que el ser humano lograra la hazaña, este valiente can orbitó la Tierra a bordo de la nave rusa Sptunik 2.
Laika pesaba seis kilos y tenía sólo tres años de edad cuando fue lanzada al espacio después de varios meses de entrenamiento. Gracias a ella los rusos pudieron estudiar sobre los efectos que podían tener los humanos en los viajes espaciales. Desafortunadamente Laika ya no regresó a la tierra
Aunque todos están de acuerdo Laika hizo en el espacio y con éxito vivido varias órbitas, hay una cuestión de cuánto tiempo vivió después de eso. Algunos dicen que el plan era para ella vivir durante varios días y que su última asignación comida estaba envenenada. Otros dicen que ella murió cuatro días en el viaje cuando había una quemadura eléctrica y la temperatura interior aumentó dramáticamente. Y otros dicen que murió cinco a siete horas en el vuelo de la tensión y el calor.
Sin embargo, ella ciertamente no vivió más de seis días después viaje, porque en el sexto día, las baterías de la nave murieron y todos los sistemas de soporte de vida fallaron. La nave continuó en orbitar la tierra con todos sus sistemas de apagado hasta que volvió a entrar en la atmósfera de la Tierra el 14 de abril 1958 y quemó en la reentrada.
Laika demostró que era posible que un ser vivo para entrar en el espacio. Su muerte también provocó debates derechos de los animales en todo el planeta. En la Unión Soviética, Laika y todos los demás animales que hicieron posible los vuelos espaciales son recordados como héroes.
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Flor Marina Forero Ch
La Humanidad entera, tiene una deuda muy grande con los animales, de todas las especies. La Vida Animal ha sido una instancia permanente para todos los experimentos que la ciencia ha realizado, casi siempre en beneficio de la Vida Humana; Algunos con fines puramente científicos, tal vez, los menos criminales o agresivos, sin dejar al margen los que han buscado objetivos políticos, militares, satisfacer los caprichos de la vanidad humana y otros, por establecer. Todas estas prácticas han sido posibles, aprovechando la indefensión de las criaturas más desvalidas y menos perversas de cuantas existen sobre el Planeta Tierra. Si pudiéramos representar el fenómeno del uso de la Vida Animal al arbitrio de los Seres Humanos en una pirámide, en el vértice superior, estaría «LAIKA», ¡LA GRAN HERÓINA! El mejor homenaje para ella, además de los monumentos, sería una fuente formada por todas las lágrimas, que muestre la fuerza hídrica de quienes hemos llorado por ella al conocer su historia. ¡»LAIKA», TU SACRIFICIO TIENE QUE SER RECORDADO ETERNAMENTE POR LA HUMANIDAD!